La Secretaria de Igualdad de Oportunidades y Trato, Noemí “Mimicha” Dalmolín, quien se ocupa de atender y contener a lxs compañerxs que son víctimas de violencia laboral, participó de nuestro programa radial “UPCN con vos” y habló acerca del órgano que aborda problemática de la violencia laboral y el acoso en el ámbito de la administración pública conformado por UPCN y la Secretaría de Trabajo en el ámbito paritario. Entre otros temas. 

“Contrario a lo que muchos piensan, enero ha sido y sigue siendo un con la misma cantidad de trabajo que el resto del año, es un mes de consultas, de atención y de acompañamiento a los compañeros afiliados, lamentablemente no hemos perdido el ritmo. Por su parte, nos reunimos con el responsable del Programa Defender de la Secretaría de Trabajo para pedir una pronta fecha de reunión de la mesa de violencia laboral que tuvo su primer encuentro a fines del año pasado. Este fue uno de los puntos que introdujo UPCN a la mesa paritaria, la creación de una comisión de trabajo para que el gremio pueda intervenir en casos de violencia laboral, ya que nosotros en este momento podemos acompañar hasta cierto punto del proceso, pero el denunciante tiene que ser el compañero afectado”, introdujo Dalmolín. 

“Una de las cosas que alertamos es que debido a la pandemia y al aislamiento que se padeció en el 2020 no solo se modificaron los vínculos, la distribución de tareas y los tiempos hacia el interior de cada familia de nuestros compañeros, sino también la forma de relacionarse en el ámbito laboral. Entonces, desde aquí estamos prestando atención a esta situación que algunos indicadores marcan como una próxima pandemia, que es la atención a la salud mental. La pandemia aumentó el estrés, la ansiedad y la depresión de los trabajadores, en especial de los trabajadores de la salud; dejando al descubierto que no se han desarrollado políticas específicas para proteger la salud mental de los trabajadores. Es una cuestión muy importante y que nos preocupa, porque a pesar de que hay servicios de salud mental, durante esta pandemia nosotros vemos que las buenas intenciones quedan ahí, en buenas intenciones nada más, no se ven acompañadas de hechos, solamente en inversión en aquellos hospitales o centros que atienden la salud mental pero no una atención interdisciplinaria hacia nuestros compañeros trabajadores”, expresó la licenciada. 

“La manera de actuar en pandemia, de desarrollarse y a veces de ejercer el poder o de dar un mandato desde los rangos superiores ha cambiado, no ha sido fácil para nadie, pero el que más eficiente ha sido en este contexto es el trabajador, que ha estado constantemente en la línea de fuego, sin atención, y muchas veces maltratado. Entonces, nosotros acompañamos este proceso y tenemos que estar alertas a este tema porque no solamente es una cuestión de violencia en el mundo del trabajo, sino una violencia que tiene un costo a largo plazo y es nada más y nada menos que la salud mental de los trabajadores”, manifestó la compañera. 

“Nuestra Secretaria Gremial Carina Dominguez presentó en su momento una serie de puntos que se solicitaban desde UPCN para la incorporación en paritarias, uno de esos puntos era conformar una mesa de trabajo con los gremios paritarios para atender y comenzar a diagramar un abordaje de la violencia en el mundo del trabajo. Porque muchas veces cuando una acompaña a un compañero en un caso de este tipo, el proceso se diluye en el tiempo y esto victimiza doblemente a la persona, porque no solamente tiene un relato cuando llega a UPCN, sino otro relato posterior en el ámbito de la Secretaria de Trabajo para ver si realmente se constituye violencia en el ámbito del trabajo o es un inconveniente a nivel institucional. Acortar estos procesos y los tiempos con una intervención gremial es a lo que nosotros apuntamos”, explicó Dalmolín. 

“No tenemos el ejercicio del respeto por la salud mental de la misma manera que lo tenemos por otras áreas de la medicina y creo que eso está a la vista. Un psiquiatra, o un neurólogo trata patologías que uno no las puede ver pero que son crónicas, neurodegenerativas, conflictivas y destrozan la vida de una persona. Eso parecería que está vedado socialmente y es algo que tenemos que cambiar. Cuando nosotros hablamos de salud, no hablamos de salud física, hablamos de una salud íntegra del ser humano como un sujeto pleno, y eso implica atender la salud mental, que no ha sido atendida, porque en el área de trabajo de salud hay por ejemplo, compañeros que han trabajado 24 horas o más y se van a su casa destrozados”, subrayó. 

“A veces cuando alguien está en un lugar donde implica poder lo ejerce de una manera poco empática, entonces hay que revisar hasta la manera de dar las órdenes, porque no es un momento cualquiera el que estamos atravesando. En ocasiones creemos que el poder es el maltrato hacia el otro para que el otro entienda que yo soy más, de ninguna manera debe ocurrir esto, hay mucho que revisar. Nosotros vamos alertando en los espacios en los cuales podemos participar, a los propios compañeros los vamos ilustrando con lo del convenio, siempre les pedimos que lean el convenio 190 de la OIT, que está ratificado por ley en nuestro país, es claro y amplía la mirada. Tenemos que conocerlo, tenemos que divulgarlo y es lo que estamos haciendo desde UPCN y también obviamente acompañando siempre a quien llega luego de vivir una situación de violencia, porque consideramos que quien llega necesita ese abrazo desde el gremio, de contención, de escucha, de respeto por lo que quiere y desea. Contener al compañero es lo primero”, concluyó.