Acción Gremial

Fabián Monzón, "la paritaria cambia el paradigma de lo que era el sindicalismo"

 15/09/2017   1598
Dirigente desde hace más de 25 años, actual integrante del directorio del IOSPER, miembro de la CGT, Fabián Monzón se define peronista. En esta nota hablamos del movimiento obrero, el IOSPER, el rol de los trabajadores en la negociación colectiva y la judicialización de la protesta gremial.

¿Cómo funciona la recaudación en el Instituto y que dificultades se visualizan al momento de brindar una prestación? 
Hablar del IOSPER implica conocer cómo ha sido la lógica de financiación de la obra social a través de estos años. En este sentido guarda los mismos antecedentes de cuando fue creada hace 45 años. En aquellos tiempos se planteó que los aportes que iba a recibir la obra social se dividieran en dos: un 4% generaba la patronal y un 3% el aporte personal, esto no se ha modificado. 
Los avances científicos nos han permitido mejorar los diagnósticos en función de las herramientas nuevas que se han dado en el campo de la medicina, esto ha traído a las obras sociales un mayor costo. Al haber mayor diferencia, esa curva que había entre recaudación y gasto se ha ido profundizado, es aquí donde las distintas autoridades han tenido que agudizar el ingenio para resolver esta cuestión. Actualmente la obra está pagando un 30% de su presupuesto en medicamentos nada más. 

¿Como fue la aceptación del fondo voluntario por parte de los afiliados? 
El fondo voluntario ha sido una alternativa que ha tenido la obra social en función de mejorar el servicio. El IOSPER, con 72 delegaciones abiertas, no tiene otra fuente de financiación que la que se planteó al principio.

Quien tiene el fondo voluntario por ejemplo tiene una cobertura del 100% a las intervenciones quirúrgicas, única obra social que plantea este beneficio. Actualmente están adheridos al fondo cerca de 200 mil compañeros. 
Es cierto que hay que seguir trabajando para mejorar el Instituto, queda mucho por hacer porque debemos ir agiornándonos a los tiempos que corren, a los avances científicos y esto en materia de salud implica inversión. Con la misma recaudación damos respuesta a mayores demandas. Todos los días trabajamos para brindar la mejor atención donde los afiliados tienen la libertad de elegir el prestador porque nuestros convenios son con las asociaciones, federaciones y colegios. 
También hemos logrado descentralizar el servicio, con el Centro de Medicina Nuclear que es un orgullo para el país con tecnología de vanguardia. Reflejo de esto es que por ejemplo desde Buenos Aires te solicitan que determinados estudios lo realicen en el centro nuestro. 

¿Cómo repercute el trabajo del IOSPER en tu persona? 
En definitiva te termina afectando, cada uno de los que llega a la oficina son compañeros, no me gusta hablar de las particularidades pero tomamos cada caso como si fuera un familiar. Tanto con el equipo de UPCN como del IOSPER hemos armado una red de contención y trabajo que permite dar respuesta a muchísimos trabajadores con situaciones muy complejas. Terminas el día en el IOSPER -a diferencia de cuando terminabas en el sindicato con el sabor del deber cumplido- sabiendo que hiciste algo pero que tal vez no alcanzó y en el fondo esto te inquieta y preocupa. 

¿Visualizás un antes y un después en materia de negociación con la puesta en funcionamiento de la Paritaria? 
En lo salarial siempre había sido una cuestión de anuncio del gobierno y los gremios en función de la aceptación o no de ésto, se manifestaban a través de alguna movida. No había esto de empezar a discutir desde una mesa salarial como comenzó a suceder en la última década donde se dio forma a la paritaria. En las primeras mesas de diálogo empezamos a discutir no solo un esquema salarial que se agotara en un porcentaje sino que buscábamos alternativas que permitieran mejorar las condiciones y la calidad del trabajo que el compañero debía realizar. 
Las paritarias marcaron un antes y un después sin dudas. En Entre Ríos nos llevó cinco años lograr tener paritaria permitiéndonos estar en un lugar de paridad con la patronal. Pero también cambia el paradigma de lo que era el sindicalismo. 
Este año estuvo signado por todo lo que sucedió en 2016, esto es un dato de la realidad porque el año pasado la inflación fue deprimiendo el salario de una manera importante. Desde UPCN consideramos que este año debía haber un recupero y una proyección para el 2017. A partir de allí, se dio una situación rara porque terminamos firmando paritaria a fines de junio y esto nunca había sucedido. Un porcentaje del aumento que se otorgó fue dado de manera arbitraria por el Gobierno, luego pasaron más de 70 días sin que exista convocatoria por parte del Estado y a partir de allí una especie de urgencia del Gobierno Provincial de resolver una situación que venía demorada pero no por culpa de los trabajadores. Nosotros varias veces solicitamos a la Secretaria de Trabajo que se reabran las paritarias. De hecho una de las mayores movilizaciones fue la marcha de los trabajadores que hicimos en esos días, además del abrazo simbólico a Casa de Gobierno para que reabran la discusión y que se ponga el ojo en el ofrecimiento que proponía el Gobierno. 

¿Consideras que los trabajadores toman dimensión del avance que significa la paritaria? 
Creo en lo personal que aun falta pero vamos en ese camino, depende mucho de nosotros los dirigentes de cómo le contamos a los trabajadores la importancia de la paritaria. Nos falta una formación sindical que nos permita ver desde las convicciones y las pasiones lo que significa la paritaria para los trabajadores. No obstante, los trabajadores te preguntan como va la negociación, -lo tienen internalizado día a día-. Esta herramienta que democratizó las relaciones laborales con la patronal se está haciendo carne en la gente. 
A parte a la paritaria le falta que tiene que haber un verdadero rigor en cuanto a su aplicación porque pasa lo del 2016 donde la gente empieza a dudar de su efectividad por la demora en la aplicación de la recategorizaciones. 

¿Cómo ves la consolidación del movimiento obrero a nivel nacional? 
Como Sindicato somos parte integrante de la Confederación General del Trabajo que nuclea a la mayoría de los sindicatos del país convirtiéndola en única Central Obrera que ha atravesado distintos momentos. Considero que la CGT debe tomar un camino que vaya en consonancia con lo que la gente necesita no con lo que quiere. 
Actualmente vivimos un contexto profundamente complejo con una acción política por parte de un Gobierno Nacional que particularmente considero que aplica un modelo neoliberal que viene a ajustar. La gente tiene que entender que todos los derechos que poseen no fueron derechos naturales, son conquistas que nos han costado a los trabajadores y en esto la CGT ha tenido muchísimo que ver. 

¿El Gobierno debe garantizar la libre protesta? 
Creo que hay una responsabilidad del Gobierno, que no es solo escuchar a los trabajadores que van a expresarse sino también la de garantizar que esos trabajadores puedan desarrollar esa protesta en tranquilidad. 

¿Qué opinión tenés de lo sucedido en Diamante y su judicialización? 
Creo que sentarme todos los dias a ver lo que pasó en Diamante es darle entidad a los que quieren callar la voz de los trabajadores. Lo que sucedió en Diamante no es producto de la casualidad, sino que responde a un modelo de Gobierno Nacional que replicó en algún funcionario de Entre Ríos. Doloroso que se diera en un Gobierno peronista. 
Es mentira que fuimos de patoteros como también es mentira que se le faltó el respeto a la Directora. 
Si llegara a pasar de nuevo, volvería a hacer lo mismo porque no tolero que se deje sin trabajo a un compañero sin una previa defensa, porque acá lo que nadie está discutiendo, lo que nadie dice es que hubo una directora que dejó sin trabajo a una compañera sin tener la facultad ni la autoridad para poder hacerlo, porque para ello tendría que haber hecho un sumario previo con un resultado favorable a lo que planteaba. Pero también debería haber hecho -antes que nada- un juicio de desafuero porque esta compañera es delegada. Todos estos derechos que se le negaron a esta trabajadora nadie los valora, nadie dice nada.  Porque si hay un funcionario que no sabe todo esto, que no sabe los procedimiento que debe realizar, pregunto: ¿porqué no le toman un examen?. Nosotros lo que hicimos fue reaccionar ante una situación injusta, desmedida que marca un total abuso de autoridad desde este lugar hasta lo que hizo la justicia con nosotros. Acá hay responsables, donde hay fiscales que a la hora de justificar porque nos detenían no sabían qué decir, mezclando lo acontecido un día lunes con lo que sucedió un miércoles. Cuando el juez preguntó los motivos, los fiscales se remitieron a decir que eran graves, sin siquiera dar fundamento. Tenemos compañeras que no fueron reconocida en la rueda de reconocimiento y sin embargo están siendo parte de este bochorno político y judicial. Mientras esto sucedía, en un barrio de Paraná mataron a un pibe y el responsable andaba suelto, mientras tanto a los dos día hubo una refriega en Buenos Aires donde el grupo Quebracho se enfrentó con la policía y hubo detenidos pero por tres horas. Mientras tanto dirigentes de UPCN que no querían firmar la paritaria en la Provincia de Entre Ríos por el 21% fueron presos. 
Lo que más me duele es que algún funcionario de un gobierno peronista haya usado esta herramienta que no es característica del peronismo. 

Mensaje para ellos es que lejos están de poder callarnos, UPCN no va a aflojar en lo que hace a la defensa de los trabajadores. Si este es el camino que quieren llevar adelante con los trabajadores en la provincia de Entre Ríos, me parece que se equivocan.

Por Noelia Bertín. Nota publicada en la Revista Nº 47 Enlace Sindical

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